
El acusado de disparar y asesinar a Olivares y Yadón el 9 de mayo último, llegó anoche al país extraditado desde Uruguay, mientras que los investigadores del doble crimen detuvieron a otro integrante de la comunidad gitana que se convirtió en el séptimo sospechoso apresado en el marco de la causa, quien también se negó a declarar.
Según se pudo saber hoy, Cádiz, tras negarse a declarar ante el juez Iturralde y la fiscal Andrade, cerca de las 2.30 de esta madrugada, quedó alojado de manera provisoria en la alcaidía del Palacio de Tribunales.