
El miércoles por la noche ingresó un frente de aire frío al área que provocó este jueves un leve descenso en las marcas térmicas que afectaron durante tres días consecutivos a la Ciudad de Buenos Aires y alrededores, con picos de 42 grados, determinando un alerta naranja por “ola de calor”.
Este jueves sopló “durante todo el día viento proveniente del norte que generó que, con el correr de las horas, la temperatura vaya subiendo”, explicó en diálogo con Télam, Cindy Fernández, meteoróloga del organismo que remarcó que “ayer por la noche hacía más calor que durante el mediodía”. De este modo, las temperaturas en el área metropolitana volvieron a subir, y la máxima esperada para este viernes es de 34 grados, pero “la humedad en el ambiente provoca una sensación térmica elevada que a las 10 ya superaba los 33 grados centígrados”.
Para el resto de la jornada se espera “nubosidad variable y mucha humedad que, junto a las elevadas temperaturas pueden ocasionar alguna lluvia o tormenta aislada para la tarde noche de hoy”, detalló la especialista.