Política
La Comisión de Legislación Penal recogió testimonios a favor y en contra de proyecto de aborto legal
La Comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados comenzó a debatir el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, respaldado por más de 60 diputados de diferentes bancadas, en una reunión en la que durante más de cuatro horas se expusieron los argumentos a favor y en contra de la iniciativa.
La reunión se redujo a expresiones en minoría dado que desde la presidencia, a cargo de Patricia Bullrich (Unión PRO), se advirtió que al inicio de la misma no existía el quórum necesario para darle el carácter formal requerido reglamentariamente.
La posibilidad de emitir dictamen también quedó descartada porque dos de los 16 diputados que impulsaban esa alternativa desde el seno de la comisión no se encontraban en el Congreso.
Adela Segarra (FPV); Victoria Donda (Libres del Sur), Margarita Stolbizer (GEN) y Pablo López de la Izquierda le solicitaron a la presidenta de la comisión que convoque para otra reunión antes del 20 de noviembre, último plazo para emitir dictámenes en este período de sesiones.
Pero Bullrich insistió en que la próxima reunión se realice en forma de plenario junto con las comisiones de Familia y Salud, a las que también fue girado el proyecto, en un intento que hoy fracasó ante la negativa de Felipe Solá (Frente Renovador) –presidente de Familia- a trabajar en esa modalidad.
El debate realizado en el anexo de la Cámara baja contó con la presencia de representantes de organizaciones que se expresaron a favor y en contra de la aprobación de la ley; ubicados en diferentes zonas de la sala, participaron del debate con vestimenta alusiva a sus causas o portando consignas y fotografías en defensa de sus posturas.
No faltaron los abucheos, silbidos, aplausos o risas burlonas ante las exposiciones de los oradores, sobre todo cuando los enunciados estaban muy radicalizados en sus contenidos.
En el inicio del debate, la diputada Segarra –autora del proyecto- dijo que es "una de las deudas de la democracia, porque el tema de la decisión de las mujeres es un tema de salud pública” y agregó que “se trata de una jornada histórica porque el tema llega por primera vez al Congreso”.
Ivana Bianchi (Compromiso Federal por San Luis), advirtió que “se está cambiando una reunión de comisión por una jornada de debate” y pidió que “que se dé un debate serio y federal que exceda a la ciudad o a la provincia de Buenos Aires”.
En tanto, Donda sostuvo que “es urgente y necesario que el Congreso de la Nación trate el tema” y que “es una obligación" para los legisladores "resguardar el derecho a la vida de las mujeres que hoy se someten a abortos clandestinos”.
El radical Juan Casañas se encargó de remarcar que en la sesión no había quórum y dijo que “en vez de votar este proyecto habría que trabajar más en educación y salud pública, porque son pésimas y son, en definitiva, las causas que llevan a este tema”.
Horacio Pietragalla (FPV) se refirió a los militantes contra el proyecto que mostraban fotos de bebes. “Me gustan esas fotos porque el parto de mi hija es lo más lindo que me pasó en la vida; pero también quiero que esa hija en el futuro tenga derecho a decidir sobre el tema”, afirmó.
Y el salteño Pablo López, del Frente de Izquierda, relató la situación que se da en su provincia: "la educación sexual está prohibida en algunos colegios, y en los hospitales maternos existen grupos que persiguen a las mujeres que van a hacerse abortos no punibles”, expuso.
Entre los visitantes que se expresaron en rechazo al proyecto, el sacerdote Francisco Javier Morad sostuvo que "siempre hay que defender la vida", que "comienza desde mismo instante de la concepción, porque si un país no es capaz de defender a los más débiles, a los indefensos, no sabe lo que les espera".
"La Iglesia defiende los derechos del niño por nacer; hay que favorecer la vida y acompañar a la madre", argumentó Morad y sostuvo que "siempre el mal se combate con el bien".
Marta Alanis, de la Campaña Católica por el derecho a decidir, apoyó la iniciativa. "Algunas de las que militamos por este proyecto somos madres, por lo que no necesitamos que nos obliguen a ser madres”, fundamentó.